Hoy, saludo a un amigo que me encuentro por la calle, y pienso mientras camino en ya no hacer enojar más al perro que se encuentra en el punto intermedio de mi trayecto.
Vivo esos momentos tan especiales que mi camino tiene preparados para mi, sin preocuparme por lo que me pueda o no sorprender, simplemente observo el entorno tan bello del sendero que recorro. Me fijo en las manchas de aceite de automóvil que hay a lo largo de la calle, y veo aquel antiguo y deteriorado chevrolet azul que lleva años parado en el mismo lugar y que ya tiene bastantes papeles dentro. Observo con detenimiento la casa que tanto me gusta que algún día será mía y también al camión de basura todos los miércoles y los viernes.
Hoy tengo varios regalos que mi camino me ofrece, y pretextos para seguir pasando. Hoy solo pondré atención en las cosas libres y sin dueño… Hoy, tengo que encontrarle otro sentido a mi vida…
Carlos E. Pacheco S.
Lunes 26 Septiembre 2005 [11:20 PM]